La actividad tuvo como objetivo cerrar las primeras intervenciones de nueve semanas que se realizaron a los estudiantes. Además, ya se trabaja en un nuevo proceso.
Victoria Medina y Marcelo Rubilar, estudiantes de quinto año de la carrera de Fonoaudiología junto a Claudia Pradenas, fonoaudióloga y tutora clínica de rehabilitación auditiva, decidieron hacer un cierre distinto a su proceso de habilitación profesional en la Escuela Biobío y Clínica de Rehabilitación Auditiva UDD.
Por eso, los alumnos de la universidad organizaron una convivencia a los estudiantes que intervinieron por nueve semanas y así agradecer su disposición para el desarrollo de la actividad. Asimismo, se aprovechó la oportunidad de informar la continuidad del proceso con nuevos pacientes, los cuales desde la semana pasada ya están recibiendo apoyo fonoaudiológico en su proceso de aprendizaje escolar.
Cabe recordar, que Fonoaudiología UDD y Escuela Biobío han logrado mantener sus lazos desde 2009, año que se tituló la primera generación de la carrera.