Desde marzo a noviembre, el Policlínico de Fonoaudiología se convierte en un espacio dentro de las prácticas profesionales de los alumnos de quinto año de la carrera, ya que tres veces a la semana abre sus puertas a pacientes de distintas edades que necesitan una evaluación en esta área.

“Es una excelente iniciativa para aprender sobre las evaluaciones y  las dinámicas con los pacientes: cómo atenderlos, qué actitudes tomar frente a las distintas situaciones que se pueden presentar, todo para entregar un servicio integral”, explica Daniela Valdez, interna de la carrera.

Bajo la supervisión de docentes de la carrera, los futuros fonoaudiólogos atienden a pacientes de continuidad o ambulatorios quienes son derivados de los Centros de Salud Familiar (Cesfam) de Hualpencillo, La Floresta y Talcahuano Sur de manera gratuita.