Actualmente se imparten cuatro carreras en pregrado desde las que han egresado cerca de 3.700 profesionales.
En una emotiva ceremonia, la Facultad de Ciencias de la Salud celebró sus 20 años su trayectoria en la Región del Biobío marcada por una enseñanza innovadora, de excelencia e integrada socialmente al país.
Sus inicios se remontan a 2003 con la apertura de Odontología, hito que marca el inicio a la formación de profesionales del área de la salud en Concepción. Más tarde se sumaron las carreras de Kinesiología, Fonoaudiología, Nutrición y Dietética y Enfermería que llegaron a ampliar la oferta para los estudiantes de la zona.
En la ceremonia estuvo presente Federico Valdés, rector de la UDD, quien contó que durante la década de los 90 visitaban colegios y notaron un interés entre los jóvenes penquistas por el área de la salud. Es así como decidieron abrir la primera carrera con sólo 12 unidades dentales, pero luego de un rápido crecimiento hoy cuenta con una clínica de 7.000 mts2 con diversas instalaciones para la atención de pacientes y la docencia.
Entre ellas, se encuentran laboratorios de esterilización, laboratorio clínico, biblioteca, radiología y diagnóstico, pabellones de cirugía, más de 100 sillones dentales y un laboratorio de simulación háptica, que incluye elementos de realidad virtual y aumentada.
“Esta gran Facultad se construyó gracias a las personas, gracias al compromiso, la ética de trabajo, la técnica de quienes trabajan en la universidad, a sus virtudes personales (…) Los resultados han sido extraordinarios. No puedo dejar de mencionar a los EDF para general de zona de la carrera de Odontología, que coparon el 20% de los cupos a nivel del país; tenemos casi 3.700 profesionales egresados de esta Facultad y 1.250 egresados de especialidades”, sostuvo Federico Valdés durante la ceremonia de celebración de los 20 años.
Por su parte, el decano de la Facultad de Ciencias de la Salud UDD, Luis Vicentela, mencionó que estos festejos marcan un hito, ya que durante estas dos décadas se ha hecho una contribución a la región a través de la formación de nuevos profesionales.
“Nuestros egresados tienen un sello que la universidad ha tratado de estimular, que tienen que ver con el liderazgo, el emprendimiento, con vinculación con el medio, con responsabilidad social. Ellos se transforman en agentes de cambio, porque tienen las capacidades para hacerlo y, fundamentalmente, están formados para ser buenas personas”, dijo.
Durante la ceremonia también se entregaron reconocimientos por años de antiguedad que incluyo al decano, directores de carrera, docentes y colaboradores.